21 marzo 2014

Tiny, una historia


Tiny, un Rottweiler estaba cerca de la muerte en una perrera de Taiwán, hasta que lo rescató un expatriado británico... míralo ahora.


 Originalmente se pensaba que era un Mastín porque estaba en tan mal estado, apenas piel y huesos, abandonado en la calle... se dejó morir. Pero Sean McCormack, lo acogió, lo ayudó a recuperarse y lo llevó a "The Sanctuary" (El Santuario, refugio que tiene al norte de Taiwán para animales abandonados o enfermos) y ahora el una vez decrépito animal ha ganado el título de "Mejor perro".


Estas imágenes muestran la milagrosa transformación que hizo.
McCormack dijo: «Cuando vi por primera vez a Tiny era grande, estaba muy enfermo y agresivo y decidí llevarlo. Al principio, pensé que era un Mastín, porque estaba en tal mal estado que no era claro de qué raza era realmente». 
«Pero mi amigo Jeff, quien tiene dos Rottweilers rescatados muy afortunados, supo de inmediato que era un Rottie».
 




A pesar de los temores de que Tiny era un animal agresivo, era "uno de los más dulces" animales  en El Santuario.
El Dr. Yang en el Hospital Clínico Veterinario YangMing en Taipei fue el veterinario quien ayudó con la recuperación de Tiny.
 


McCormack dijo: «Estoy agradecido al doctor Yang por la recuperación increíble de Tiny, aunque también creemos que el entorno natural y feliz que le ofrecimos, la dieta saludable y el cariño constante, jugó su parte en su pronta recuperación. Estamos felices poque Tiny fue coronado campeón de 2014 y esperamos sirva como materia de reflexión para todos aquellas organizaciones de rescate que matan animales como Tiny para 'poner fin a sus sufrimientos'».



 



















Ahora Tiny está siendo atendido por Laeila Pereira, una voluntaria del santuario. Laeila dijo: «Parecía que había perdido la vida. Me enamoré inmediatamente del grande y adorable Rottie con un nombre irónico (Tiny es 'pequeño' en inglés); me mudé a un apartamento nuevo para poder adoptarlo. Ahora es un perro hermoso y muy bien amado».
 

 
Tiny y Laelia



Sean McCormack, originario de Folkestone, Kent, se trasladó a Taiwán hace 15 años, alquiló un predio e hizo un santuario para cuidar a los animales no deseados que tienen pocas probabilidades de ser reubicados.Siempre preocupado por los gatos callejeros, cerdos que tenían en apartamentos y luego echaron por crecer, ardillas bebés y un montón de perros, agresivos o temerosos, ciegos y discapacitados.
Pero el Santuario se enfrenta ahora a un futuro incierto después que la propietaria le dijo Sean que quiere vender la propiedad que es el hogar de 200 animales rescatados.Se enfrentan a la perspectiva de que han quedado sin hogar.
 

McCormack agregó: "Estamos iniciando una campaña IndieGoGo y espera utilizar la historia de Tiny para ayudar a llamar la atención internacional sobre nuestra situación. Estamos mirando para comprar un hermoso sitio de 2,5 hectáreas para dar a nuestros perros, gatos, cerdos, conejos, ardillas, palomas, erizos, periquitos y muy pronto ciervos, un hogar permanente y feliz».

Sean McCormack y Tiny



Fuente:  dailymail.co.uk / Wills Robinson