14 julio 2012

Lennox fue ejecutado

El perro finalmente fue ejecutado en Belfast, aunque nunca había atacado a nadie, solo por parecerse a un Pit Bull, raza prohibida en Irlanda.


La muerte de Lennox, un perro de siete años de edad sacrificado en Irlanda, ha provocado fuertes reacciones entre los defensores de los derechos de los animales.

Hace dos años, Lennox fue capturado por las autoridades locales después de ser considerado un peligro público para la comunidad de Belfast. El perro, descrito como un cruce entre «Bulldog» americano y Labrador, tuvo que abandonar su hogar en abril de 2010 porque se parecía a un «Pitbull».




Durante todo este período, su dueña, Caroline Barnes, inició una batalla para que el Consejo de la Ciudad revocase la sentencia que lo consideraba una amenaza para la seguridad. Numerosas entidades pro-animales y personas de todo el mundo se hicieron eco de la situación y llevaron a cabo una masiva campaña vía internet para salvarle


 












Barnes sostuvo en todo momento que Lennox no era un perro agresivo: «No era un peligro, nunca había mordido a nadie». Desgraciadamente, el Ayuntamiento de Belfast no pensaba lo mismo y Lennox fue ejecutado mediante inyección letal.