22 diciembre 2013

Bacterias beneficiosas




Un perro en la casa es algo más que una buena compañía. Hay cada vez más pruebas de que la exposición a los perros y al ganado los primeros años de vida puede disminuir las posibilidades de que los niños desarrollen alergias y asma. Ahora, los investigadores han rastreado el efecto beneficioso para la salud de un microbio que vive en el intestino. Su estudio, en ratones, sugiere que la suplementación de la dieta de un lactante con la combinación adecuada de bacterias podría ayudar a prevenir las alergias.

Hace más de una década, los investigadores estadounidenses revisando las historias clínicas de los niños con mascotas - perros y en menor medida gatos - y descubrieron que estos niños eran menos propensos a desarrollar alergias y asma que otros niños. Otros estudios epidemiológicos en Europa han apoyado a este respecto, no sólo con los animales domésticos sino con el ganado también. 


En 2010, Susan Lynch, una microbióloga de la Universidad de California, San Francisco, mostró que los perros que viven en parte al aire libre y entraban a la casa, portaban bacterias algunas de las cuales fueron también encontradas en el intestino humano. Ella y otros biólogos ya habían descubierto que en los microbios del intestino estaba la respuesta inmune, y por lo que se preguntó si la protección proporcionada por las bacterias intestinales ( Lactobacillus johnsonii ) provendrían de los perros. Posteriormente una serie de estudios demostró que así era efectivamente. 




Fuente: Revista Science