31 enero 2013

La raza más popular en U.S.A.

NUEVA YORK:  El Labrador celebró sus 22 años de reinado como el perro más popular en Estados Unidos, aunque el Bulldog  está ganando terreno en las preferencias.



















En el ranking anual del American Kennel Club, el Labrador retriever sigue estando a la cabeza, con otros perros grandes imponiéndose sobre las razas más pequeñas, como el Yorkshire terrier y el Caniche miniatura, que han perdido popularidad.

"Las grandes razas están ganando terreno" - dijo la portavoz del AKC, Lisa Peterson -. "El Bulldog se ha abierto camino entre los cinco primeros"- dijo -, desplazando al Yorkie, que cayó al sexto lugar

El 2 º fue el Pastor alemán, seguido por el Golden retriever y el Beagle, que intercambian los puestos tercero y cuarto del ranking del año pasado "


2° Pastor Alemán


3° Golden Retriever

4° Beagle


Con más de dos décadas continuas como raza más popular en los Estados Unidos, el Labrador igualó la hazaña del Caniche, que reinó durante 22 años consecutivos en los años 1980 y 1990. El  Caniche consiguió el octavo lugar este año.

Poodle o Caniche


El AKC también dio a conocer algunas de las preferencias regionales que indicaba que el  Bulldog se estaba convirtiendo en favorito en Nueva York, en el puesto número 2, mientras que el Bulldog francés fue tercero.

Bulldog
Bulldog francés















Fuente: The Daily Star / Chris Michaud

26 enero 2013

Bichos que merece la pena tener en el jardín

Los jardineros se pasan el día hablando de bichos beneficiosos, pero normalmente no dicen cuales son.
Aquí hay una lista de bichos que es bueno tener en el jardín porque comen insectos perjudiciales y ayudan a aportar los nutrientes valiosos que tu jardín necesita para prosperar:


1. Abejas – todos sabemos lo importantes que son para la polinización. (Un mundo sin abejas estaría abocado a desaparecer).



2. Avispas – comen áfidos, ácaros, moscas blancas, huevos de oruga, larvas de polilla, escarabajos y tijeretas del maíz.



3. Mantis Religiosas – estos bichos de aspecto inusual son estupendos para controlar a los áfidos.



4. Mariquitas o Vaquitas de San Antonio– estas “chicas” del jardín controlan a los áfidos, las cochinillas harinosas y los ácaros.




5. Escarabajos – particularmente los escarabajos de tierra, son fantásticos comiendo orugas, gusanos cortadores e incluso babosas.




6. Arañas – son extremadamente beneficiosos por comer una gran variedad de insectos plaga.




7. Crisopas Verdes – consumen áfidos, ácaros y una gran variedad de huevos de insectos plaga.


8. Lombrices – estos gusanos hacen más por tu jardín de lo que crees. Aportan nutrientes, airean el suelo y controlan su PH.



Contribuyendo al bienestar de estas especies beneficiosas no solo podrás librarte de las plagas peligrosas sino que conseguirás cultivar tus vegetales de forma orgánica y ecológica.



Fuente: Gardenmandy

25 enero 2013

Ucrania, un infierno para los animales abandonados

¿Se acuerdan de lo sucedido en Ucrania para la celebración de la Eurocopa 2012?
Una simpatizante del Partido Animalista nos cuenta lo que ocurre en Ucrania, un país de Europa en el que la situación de los animales abandonados es dramática, sufriendo el desamparo legal.


Lo que ha pasado en los últimos meses en Ucrania, y que nosotros hemos visto y vivido, es una parte muy pequeña de un problema que se produce desde hace años.  Para la celebración de la Eurocopa 2012 han matado a los perros y gatos callejeros con veneno, quemados, tirados a contenedores, etc.
Ucrania buscó la forma más rápida y fácil para solucionar lo que ellos consideraban un problema, y no por la situación  en la que se encontraban los animales, sino por la imagen que podría dar el país.
Aunque hay leyes en defensa de los animales que están muy bien hechas, no existe control sobre las mismas y no se exige su cumplimiento. Solo en los últimos meses han matado a más de 200.000 perros y gatos callejeros para poder ¨limpiar¨ las calles para la Eurocopa.

Los ayuntamientos limpiaron las calles poniendo veneno para acabar con la vida de los perros y gatos callejeros sin reparar en la muerte dolorosa y lenta que esto les producía. Los animales lloraban en las calles y  delante de los ojos de la gente, en las zonas de juegos infantiles… Buscando ayuda. Este sistema ha provocado la muerte, también, de perros domésticos e, incluso, la de una chica en la ciudad de Sebastopol.
Además, un grupo de chicos, llamados ‘dog hunters’ (cazadores de perros), se dedicaban a matar a los perros callejeros, argumentando que protegían a la ciudad de los perros agresivos. Posteriormente, colgaban en internet sus ‘hechos heroicos’. Uno de ellos ha sido detenido y condenado (‘el sadista Vedulu’), pero en aquel momento no se puso control a la situación. Este grupo utilizaba pistolas neumáticas para matar a los animales. Actuaban a cualquier hora del día.


No solo no se trató de remediar esta situación por parte de las autoridades, sino que los propios servicios municipales habilitaron hornos crematorios a los que arrojaban a los animales vivos.

Este exterminio, aunque se produjo para la celebración de la Eurocopa 2012, no es algo excepcional. La situación de los animales en Ucrania, especialmente de aquellos que viven en la calle o son recogidos y llevados a las perreras, es miserable.
En los albergues municipales de recogida de animales, éstos viven penurias y torturas constantes. Los trabajadores los torturan poniéndoles palos en la boca para impedir que puedan comer o beber y en algunos casos los cuelgan hasta que mueren lentamente.

A pesar de toda esta violencia institucionalizada hacia los animales, los grupos animalistas no paran de luchar. Exigen  y consiguen que haya protectoras de animales,  programas de esterilización con lugares gratuitos tanto para perros callejeros como domésticos y control sobre la población de los animales vagabundos. Sin embargo, un problema añadido es que el dinero que el Gobierno presupuesta para estos asuntos no es gestionado por organizaciones animalistas, sino por los funcionarios del Estado.


 La cara amable de todo esto son los ciudadanos anónimos que recogen animales enfermos o maltratados, y con su dinero hacen frente los gastos de los tratamientos, buscándoles después hogares donde vivir. Algunos de ellos sacan adelante protectoras y buscan casas de acogida. Además, alimentan y esterilizan a los perros y a los gatos callejeros, organizan grupos de ayuda en Internet, no paran de hacer protestas y denunciar casos de maltrato… También se dedican a la prevención, y educan para que la sociedad se sensibilice y trate con respeto a los animales.
En definitiva, a pesar de la situación terrible y de la falta de control por parte de las administraciones, los animalistas siguen su lucha, buscando ayuda dentro de su país y también fuera de él. No paran, quieren  que pronto el mundo escuche su voz, concienciando y educando para conseguir día a día unos derechos reales para los animales en este país.


Albena Aceva












Fuente:PACMA (Partido Animalista)


24 enero 2013

Cliff, el perro que detecta bacterias intrahospitalarias

Cliff es un cachorro de Beagle que tiene más de un 80% de efectividad para detectar Clostridium difficile;  una infección hospitalaria que puede propagarse rápidamente entre las personas de edad con consecuencias letales. 




El centro médico de la VU University, en Amsterdam, Holanda, decidió probar la capacidad de perros entrenados para poder rastrear a través del olfato la presencia de esta poderosa bacteria.

Las actuales pruebas de laboratorio para diagnosticar la condición son caras y lentas, y pueden retrasar el inicio de tratamiento por hasta una semana. Así, el uso de un perro con una nariz sensible para patrullar las salas y seleccionar los pacientes infectados es rápido y eficiente.

Como un sabueso, el Beagle tiene pocos iguales -puede encontrar un ratón en un campo de un acre en menos de un minuto-. Cliff identificó correctamente 25 de los 30 pacientes con C. difficile  (una tasa de éxito del 83 por ciento ) y 265 de los 270 controles negativos, después de sólo dos meses de entrenamiento.



Fuente: cadena3.com




21 enero 2013

Una perra en el túnel del Metro de Madrid

Por Ruth Toledano ( eldiario.es)

La galga abandonada vagó durante tres días por el túnel del Metro de Madrid. Sola, aterrada, herida. La vieron por primera vez el jueves a las 12 de la noche y a las 8 de la mañana del viernes un grupo de personas pertenecientes a varias asociaciones de protección animal (Justicia Animal, Alba, Baas Galgo, El Hogar de Luci, Más Vida y la SPAP) iniciaron las gestiones para obtener los permisos de la empresa de transportes que permitieran su rescate. Se sabía que estaba entre las estaciones de Sáinz de Baranda e Ibiza. Consistía en bajar a las vías y seguir el procedimiento que los voluntarios conocen bien: cuando un perro o un gato asustado y hambriento no deja que nadie se acerque, se colocan las llamadas jaulas-trampa; se deja comida dentro y los animales acaban por acercarse y quedar atrapados. Así se logra el rescate. Su colocación no alteraba ni impedía la circulación de los trenes, pues los túneles del Metro de Madrid tienen huecos en los muros, espacios retranqueados a los que se podría haber atraído a la galga sin mayor peligro.


La galga murió atropellada por un convoy que le seccionó una pata. Tenía profundas heridas en otra. Agonizó desangrándose, aterida, espantada, más sola que nunca. Murió porque los responsables del Metro de Madrid no permitieron que personas con experiencia actuaran para salvarla. ¿Por qué? Porque era solo una perra. A las 7 de la tarde del sábado, un conductor avisa de que ha visto a la galga tirada junto a las vías, en el túnel, a unos 100 o 200 metros de Sáinz de Baranda. No se sabe si sigue viva, aunque Metro de Madrid informa de que está “presuntamente muerta”. Las voluntarias piden que se les permita ir a por ella. Se les niega de nuevo ese permiso. Ruegan que pueda ir entonces una ambulancia veterinaria o, al menos, los servicios de recogida de animales del Ayuntamiento. Ruegan compasión. Quizá aún se pueda hacer algo. Metro de Madrid responde que eso solo será posible a partir de las 2.30 de la mañana, cuando termine el servicio en toda la red suburbana. Siete horas más tarde para auxiliarla. ¿Por qué? Porque era solo una perra.

Desesperadas e impotentes, Matilde Cubillo, de Justicia Animal, e Irene Mollá, de Más Vida, toman una decisión: bajar a las vías y entrar en el túnel a por la galga. El Jefe de Seguridad les advierte de que lo que van a hacer no está permitido y traerá consecuencias. Mati e Irene comprueban en los paneles que el próximo tren llegará en 18 minutos. Tienen tiempo. Saltan. Se adentran en el túnel. Se iluminan apenas con la linterna de un móvil. Cuando regresan al andén llevan a la galga en brazos, tapada con un abrigo para no perturbar a los viajeros. Su cuerpo aún no está rígido, todavía sangra.

Mientras las personas que saltaron a las vías serán sancionadas, varias asociaciones de protección animal denunciarán a Metro de Madrid por maltrato, dado que, en sus instalaciones y bajo su responsabilidad, se dejó agonizar a una perra sin auxilio. Asimismo, la FAPAM (Federación de Asociaciones de Protección Animal de la Comunidad de Madrid) exigirá a la Consejería de Transportes que se cree un protocolo de actuación para casos similares. Pero, además, muchas voces han denunciado en las redes sociales que los trabajadores de Metro de Madrid no tuvieran la valentía de desobedecer las órdenes de sus superiores y pararan los trenes entre las estaciones de Sáinz de Baranda e Ibiza. Les acarrearía consecuencias, pero si quien estuviera perdida y, más aún, agonizante en el túnel hubiera sido humana, lo habrían hecho.

En ese caso, es probable que los trabajadores no hubieran tenido que desobedecer, porque los superiores habrían ordenado el paro, la búsqueda y el rescate, pero aquí y ahora interesa reflexionar sobre la hipótesis de que no fuera así: ¿habrían obedecido los trabajadores a sus superiores aún a riesgo de atropellar a una humana? Ojalá podamos pensar que no, que habrían desobedecido, que ellos mismos se habrían tirado a las vías y habrían corrido a socorrerla. Serían héroes y la sociedad en su conjunto repudiaría a los desalmados que les dieron órdenes contrarias al auxilio, a la compasión, a la solidaridad, a la bondad, al coraje. Nos habrían hecho mejores. Pero solo era una perra. Una pobre galga abandonada.

Metro de Madrid ha emitido un comunicado al respecto: “Lamentamos que el perro haya aparecido sin vida. Os podemos asegurar que se ha hecho todo lo posible en todo momento por rescatarlo”. Falso. Lo que hicieron los superiores fue impedir la labor de personas expertas en rescates. Y los trabajadores, obedecer. Los mismos trabajadores que se atreven a parar los trenes para ejercer su, legítimo, derecho a la huelga. ¿O es que cuando hacen huelga obedecen órdenes de sus superiores? ¿Por qué no tomaron la misma decisión para salvar la vida de la galga? ¿Por qué no se atrevieron a desobedecer?

En este mundo nuestro anegado de abuso, de insensibilidad, de injusticia, nuestra revolución ha de ser la desobediencia. La que desobedece las órdenes de la injusticia. La que se enfrenta a la insensibilidad. La que combate el abuso. Como los médicos que se han negado a obedecer la orden de no atender a las personas sin papeles. Como los funcionarios que se niegan a obedecer la orden de ejecutar desahucios. Es muy sencillo: queremos un mundo donde el Metro pare para salvar a una perra. Un mundo en el que un trabajador se la juegue no solo por su paga extra sino por la vida de una galga. Un mundo donde los superiores sean mínimamente inteligentes, lo justo para darse cuenta de que salvar a una perra abandonada no solo es un deber moral sino que les granjeará simpatías.

Esa galga ha muerto sola, aterrada, desangrada en un túnel que es el símbolo de otra oscuridad: la de conciencia. Era una galga sin chip, sin hogar, una más de las miles que los cazadores utilizan, maltratan, abandonan y asesinan. Su raza es autóctona de nuestro país y su situación, otro símbolo: una belleza, una nobleza, una lealtad despreciadas, atropelladas, robadas, tiradas en un túnel. Como todo lo demás: a eso nos están acostumbrando nuestros superiores (en el trono, en el Gobierno, en la empresa). Si no paramos en seco y lo impedimos, nos seguirán robando, amputando, dejando morir. 

Debemos desobedecer. Saltar a las vías de la conciencia y parar los trenes de esta cultura podrida. Como Mati Cubillo e Irene Mollá. No seguir obedeciendo órdenes crueles e injustas. Si no lo hacemos, agonizaremos en el abandono, nos matarán en este túnel de miseria moral. Como a una pobre galga abandonada.


Fuente: eldiario.es


Video:

18 enero 2013

Beppo, el gato de Borges




En el libro "Chatran y su mundo astral" del historiador argentino Vicente O. Cutolo,  hay un capítulo dedicado a "Beppo, el gato de Borges", allí cuenta que a Borges le impresionaban y seducían los felinos desde pequeño, inclusive muestra algunos dibujos de tigres hechos cuando era niño. También escribió algunas obras inspiradas en el tigre como El oro de los tigres (1972), Historia de la Noche, Rosa y azul, La rosa de Paracelso y Tigres Azules (1977).




Dice Borges que le trajeron a Beppo del barrio de la Boca, y que "se llamaba Peppo, pero que era un nombre horrible, entonces se lo cambié enseguida por Beppo, un personaje de Byron. El gato no se dio cuenta y siguió su vida".

Beppo era un gato blanco que acompañaba a Borges todo el tiempo y le gustaba jugar con los cordones de sus zapatos o sentarse en su falda. Borges ya estaba ciego, y le gustaba acariciarlo y recorrerlo con sus manos. Beppo murió en 1985, con más de 15 años.
La muerte de Beppo le produjo a Borges mucha tristeza, pero como tenía un gran manejo de la ironía, cuentan que una vez dijo "Quisiera morirme hoy mismo y no tengo la suerte que tuvo Beppo; aunque a lo mejor sí, ahora que estoy con gripe tal vez muera."

Cita Epifanía Uveda "Fanny" (la mucama de Borges). "El gato se llamaba Pepo por la Pepona Reinaldi, un jugador de futbol. Borges recordó un poema de Lord Byron que se llamaba Beppo y lo rebautizó".
Un día Fanny vio que Beppo se miraba en un espejo y creía ver otro gato, posiblemente a un rival. Entonces se lo contó a Borges y éste escribió el poema El gato blanco que es encuentra en el libro "La Cifra" de 1981.


El gato blanco y célibe se mira  
en la lúcida luna del espejo
y no puede saber que esa blancura 
y esos ojos de oro, que no ha visto 
nunca en la casa, son su propia imagen.

¿Quién le dirá que el otro que lo observa
es apenas un sueño del espejo?


Me digo que esos gatos armoniosos,
el de cristal y el de caliente sangre,
son simulacros que concede el tiempo
un arquetipo eterno. Así lo afirma,
sombra también, Plotino en las Ennéades.


¿De qué Adán anterior al Paraíso,
de qué divinidad indescifrable
somos los hombres un espejo roto?


Fuente: Dr. Rubén M. Gatti /Centro de Medicina Felina BA


Un perro acompaña a su amo...en el cementerio.

Cómo encontró Capitán la tumba donde yace su amo es un misterio.

La fidelidad de Capitán parece no tener fronteras, ni siquiera la muerte ha impedido que este perro se separe de su amo, ya que desde hace seis años duerme sobre la tumba de su dueño en un cementerio de la localidad argentina de Villa Carlos Paz, en la provincia de Córdoba.



"El perro apareció un día en el cementerio, sin que nadie lo trajera, y empezó a dar vueltas por todos lados hasta que encontró solo la tumba de su amo", explicó el director del cementerio.

Capitán, fue el regalo sorpresa que Miguel Guzmán le hizo a su hijo Damián en 2005. En marzo de 2006, Miguel falleció y Capitán desapareció de la casa familiar, aunque regresó al poco tiempo y se quedó en la calle durante algunos días, cerca de la vivienda.
Después, desapareció definitivamente y los Guzmán pensaron que había muerto o había sido adoptado por otra familia. Hasta que un día, cuando fueron de visita al cementerio, lo encontraron sobre la tumba de Miguel.

"El domingo siguiente volvimos a visitar la tumba y el perro estaba ahí. Esa vez nos siguió, en el regreso. Se quedó un rato con nosotros en casa pero después volvió al cementerio", relató Verónica, la viuda de Miguel.

Capitán  deambula por el cementerio y a veces regresa a casa de su dueño durante unas horas, pero al atardecer busca la tumba de su amo para dormir.
La verdad de cómo encontró Capitán, no solo el cementerio, sino además la tumba exacta donde yace su amo, sigue siendo un misterio, ya que el perro no acompañó a los familiares durante las exequias.




La historia de este abnegado can recuerda a la de Hachiko el Akita Inu que permaneció durante nueve años en una estación de tren en una localidad japonesa esperando el regreso de su dueño que había muerto.

Fuente: RT.com




15 enero 2013

Un perro vuelve a andar y correr con prótesis

Un perro al que supuestos narcotraficantes mexicanos le mutilaron las patas delanteras, se recupera en un refugio para animales maltratados y abandonados.
La dueña del lugar, Patricia Ruiz, dice que "Lemon Pie" (Pay de Limón), que tiene sangre de pastor belga, recibió en 2012 unas patas protésicas y ahora camina, salta y corre.



Patricia narró que el perro fue abandonado en un bote de basura para que muriera después de que le cortaron las patas delanteras. Le contaron que narcotraficantes habían practicado con el perro para mutilar a personas.

Video:

  “Lemon Pie” es uno de 128 perros que sufrieron maltrato y viven ahora en el refugio Milagros Caninos. Perros con andaderas, ciegos, sordos o enfermos se divierten y corren en este enorme lugar ubicado en el sur de la Ciudad de México.

Fuente: AP y Noticias24 - Venezuela

10 enero 2013

Rabia o Hidrofobia


Definición:

Es una enfermedad viral a menudo mortal, que afecta el sistema nervioso de los mamíferos.
En las últimas etapas de la enfermedad, el virus se traslada desde el cerebro a las glándulas salivales y la saliva. Desde allí puede transmitirse a través de una mordedura o por contacto con las membranas mucosas (nariz, boca y ojos). La enfermedad es fatal una vez que se inician los síntomas. Los perros pueden contagiar a otros por 2 semanas antes de que aparezcan los síntomas de la enfermedad, por lo que es sumamente importante confinar y observar todos los animales sospechosos. 

La rabia es predominantemente una enfermedad de carnívoros salvajes pero puede afectar a cualquier mamífero, incluyendo los seres humanos.
El virus es muy sensible al calor, a los detergentes ligeros (incluyendo jabones ordinarios) y a los desinfectantes, y no puede sobrevivir demasiado tiempo fuera del cuerpo de un animal infectado.
Este germen se localiza en la saliva de un animal infectado. No puede penetrar la piel intacta. Pero puede ser transmitido por los lamidos mutuos entre animales, cuando éstos se acicalan mutuamente y la saliva de un animal infectado entra en contacto con una herida abierta.
El virus se multiplica en el sitio de la mordedura, invade fibras nerviosas, y viaja al cerebro. El período de incubación (el tiempo entre la mordedura y el inicio de síntomas) depende de la distancia de la herida a la cabeza y el cuello: cuanto más cercana es la cabeza, más corta es la incubación. El crecimiento del virus en el cerebro causa severa degeneración nerviosa y, eventualmente, la muerte. El virus también se propaga del cerebro a lo largo de los nervios a otros órganos, incluyendo las glándulas salivales, donde el virus se excreta en la saliva. Las mordeduras en general son exposiciones de riesgo elevado.


La rabia es una enfermedad aguda infecciosa viral del sistema nervioso central ocasionada por un Rhabdovirus que causa encefalitis aguda. El virus de la rabia se encuentra difundido en todo el planeta y ataca a los mamíferos domésticos y salvajes, incluyendo al hombre. Se encuentra en la saliva y en las secreciones de los animales infectados y se inocula al hombre cuando éstos lo atacan y provocan en él alguna lesión por mordedura; además puede ser transfundido cuando un individuo que tiene alguna cortada en la piel (vía de entrada del virus) tiene contacto con las secreciones salivales de un animal infectado. Los vectores animales importantes incluyen: perros, gatos, murciélagos, mangostas, zorros, hurones, mapaches, y lobos.

Causas:

La rabia se propaga por medio de saliva infectada que entra al cuerpo a través de una mordedura o un corte en la piel. El virus viaja desde la herida hasta el cerebro, donde causa inflamación. Esta inflamación provoca los síntomas de la enfermedad. La mayoría de las muertes por rabia ocurre en niños.
El período real entre la infección y la aparición de los síntomas (llamado “período de incubación”) varía entre 10 días y 7 años. El período de incubación promedio es de 3 a 7 semanas.
En el pasado, los casos de rabia en humanos en los Estados Unidos generalmente se producían por una mordedura de perro, pero recientemente hay más casos de rabia en seres humanos que han estado relacionados con zorros o murciélagos.

Aunque las mordeduras de perro representan una causa común de rabia en los países en desarrollo, en los Estados Unidos no se ha informado de casos de rabia causados por mordeduras de perro en muchos años, debido a la vacunación generalizada de animales.
En muy raras ocasiones, la rabia ha sido transmitida sin una mordedura real y se cree que esto ha sido causado por la saliva infectada que ha llegado al aire.

Síntomas:

Los síntomas de la rabia en los animales pueden incluir uno o más de los síntomas siguientes: excitabilidad; comportamiento o ataques violentos; el morder; agitación; agresividad inusitada; bravura; salivación excesiva; aversión al agua (de donde se deriva el nombre “hidrofobia”); imposibilidad de tragar o de beber; pupilas dilatadas; disfunción muscular; irregularidades de la coordinación o del paso; parálisis; convulsiones; y eventualmente la muerte, casi siempre en el plazo de 10 días. Estos síntomas se definen como “rabia furiosa”.
Algunos animales con la rabia no exhiben síntomas rabiosos típicos. Esto se refiere generalmente como rabia muda. Estos animales pueden demostrar otros síntomas de enfermedad general que pueden incluir una evitación de contacto con los seres humanos u otros animales, letargo, la pérdida de apetito, y eventualmente la muerte. Algunos perros sencillamente aúllan por días enteros y se retiran a lugares oscuros. Pueden perder control de sus patas traseras.
Un perro puede mostrar solamente síntomas muy leves de anorexia (el no comer) y de apatía, y luego se encuentra muerto en tres o cuatro días. A veces el perro no da en absoluto señales de enfermedad, y repentinamente se encuentra muerto. Una autopsia de post-mortem revela rabia.
Pero estos síntomas no son exclusivos de la rabia. El dolor, el miedo o la confusión extrema pueden hacer un animal agresivo. La salivación profusa y la inhabilidad de tragar pueden resultar de una obstrucción en la garganta, cuerpos extraños en los dientes, o la ingestión de sustancias irritantes o tóxicas. El aullar podría deberse al hambre, al miedo, o al dolor. 

Además, las infecciones tetánicas son a veces diagnosticadas erróneamente como rabia. Pero, en cualquier caso, tales animales deben siempre tratarse con precaución ya en su dolor pueden atacar. Actualmente, la rabia solamente puede ser diagnosticada mediante el examen del cerebro de un animal infectado, y esto debe llevarse a cabo en un laboratorio apropiado. En estos momentos no hay pruebas disponibles para hacer un diagnóstico definitivo de rabia en un animal vivo.

 

En los seres humanos:

La exposición de un ser humano a un animal rabioso no siempre da lugar a la rabia. Si el tratamiento de protección se instituye con prontitud después de una exposición a la rabia, se prevendrá la mayoría de los casos de rabia. Sin embargo, todas las mordeduras de animales deben ser evaluadas por un profesional de salud para determinar si se requiere tratamiento.
El virus de la rabia puede infectar cualquier mamífero, pero la infección es más común entre los perros, gatos, vacas, caballos, murciélagos, zorros. La transmisión ocurre generalmente cuando el animal vector (el animal que lleva la enfermedad) se encuentra en la fase latente (antes de que aparezcan los síntomas).

Período de incubación: 

En los seres humanos (el tiempo entre la exposición y el inicio de síntomas) es variable, pero es normalmente de 3 a 8 semanas. En los perros, el período de la incubación es normalmente entre 21 y 80 días, pero puede ser más corto o más largo.


Sintomáticamente, el enfermo pasa por 4 fases:

1.- Fase de incubación: Dura entre 60 días y 1 año y es asintomática.
2.- Fase prodrómica: Dura entre 2 y 10 días. Aparecen síntomas inespecíficos.
3.- Fase neurológica: Dura entre 2 y 7 días. Afecta a cerebro. El paciente puede manifestar hiperactividad, ansiedad, depresión, delirio, parálisis, espasmos faríngeos…
4.- Fase de coma: Dura entre 1 y 10 días. El paciente entra en coma y finalmente muere, bien por parada cardiaca, bien por infecciones secundarias.
A partir de la segunda fase, es mortal en el 99,9% de los casos. La única opción de tratamiento es suministrar Inmunoglobulinas e inyectar una vacuna contra el virus, lo que sólo es eficaz durante la fase de incubación.
La vacuna se fabrica a partir de virus aislados de animales muertos. Se hacen crecer sobre cultivos celulares y después se purifican e inactivan con distintas sustancias químicas. Es necesario aplicar entre 4 y 6 dosis.
En la mayoría de los casos el diagnóstico suele ser post-mortem. No obstante, se puede diagnosticar por microscopía gracias a la aparición de los “cuerpos de Negri” en las células.

Síntomas:

Los síntomas tempranos en los seres humanos incluyen irritabilidad, la depresión inexplicable, el dolor de cabeza, la fiebre, y a veces la comezón o el dolor en el sitio de la exposición. La enfermedad progresa eventualmente a la parálisis, a los espasmos de los músculos de la garganta, a las convulsiones, al delirium, y a la muerte. Es importante observar que una vez que aparecen los síntomas, la rabia no puede ser tratada con éxito.


• Ansiedad, estrés y tensión
• Babeo
• Convulsiones
• Sensibilidad exagerada en el área de la mordedura
• Excitabilidad
• Pérdida de la sensibilidad en un área del cuerpo
• Pérdida de la función muscular
• Fiebre baja, 102° F (38.9° C) o menos
• Espasmos musculares
• Entumecimiento y hormigueo
• Dolor en el sitio de la mordedura
• Reflejo de Babinski positivo
• Inquietud
• Dificultad para deglutir (las bebidas producen espasmos de la laringe) o dificultad para tragar sólo con líquidos


Contagio:

La transmisión de persona a persona es extremadamente rara,
La exposición a un animal rabioso no resulta siempre en rabia. En general, se podrá prevenir la mayoría de los casos si se instituye tratamiento inmediato después de una exposición a la rabia. Aún así, un profesional médico debe evaluar todas las mordeduras.
La transmisión sólo es posible mediante el contacto directo con un vector portador o con material biológico procedente del mismo, ya que al tratarse de un virus con una envuelta lipídica es muy sensible a los factores ambientales pero se deben tomar precauciones para evitar exposición a la saliva de la persona enferma, incluyendo saliva en forma de aerosol debida a la tos, el estornudo, o el escupir.
La rabia es un virus que puede ser trasmitido a cualquier mamífero. Desde un perro hasta casi cualquier animal rural entre los que encontramos el ganado, las ratas etc.
El virus se presenta comúnmente en los nervios o en la saliva del animal afectado. Comúnmente, pero no siempre, el virus es transmitido gracias a una mordida. En muchos casos el animal es extremadamente violento y ataca sin provocación aparente, su comportamiento varia igualmente.

La patología en la especie humana es la siguiente: 

1.- Infección por herida o mordedura. Antiguamente también se transmitía por operaciones como el trasplante de córnea.

2.- El virus tiene una primera multiplicación en las células musculares y de ahí pasa a las neuronas y finalmente a los ganglios nerviosos.
3.- El lugar donde la enfermedad de manifiesta más acusadamente es el cerebro (encefalitis). Sin embargo, el tiempo que tarda en desarrollarse esta etapa es bastante largo y depende de muchos factores.
4.- Los virus comienzan a pasar de unas neuronas a otras a través de los contactos sinápticos, lo que hace que el sistema inmune sea incapaz de detectarlos.
5.- Desde el cerebro puede viajar, a través de los nervios, a cualquier parte del cuerpo, dando una infección sistémica.

Tratamiento:
El tratamiento inmediato después de la exposición al virus de la rabia (ej. mordedura) impide el desarrollo de los síntomas, los cuales en ausencia de tratamiento conducirían irremediablemente a la muerte. Es recomendable lavar con agua y jabón, cuidadosamente y sin raspar la herida, ya que de este modo se ayuda a eliminar el virus, y acudir de inmediato a un centro hospitalario para recibir atención especializada. Tal atención en general consiste en la aplicación de la vacuna post exposición en los dos días siguientes a la mordedura. Las medidas de prevención de rabia en humanos comprenden tanto al tratamiento profiláctico pre o post exposición como las de intervención sobre los huéspedes del virus de la rabia. . El Tratamiento post exposición contempla la aplicación de solo vacuna antirrábica (esquema reducido 10 dosis) o aplicación de vacuna antirrábica + suero antirrábico (esquema clásico 14 dosis mas suero) y dicho esquema depende del tipo de exposición y de la condición del animal agresor.

Inducción al coma:  

Se ha reportado en el mundo un caso en el cual se sobrevivió a la rabia luego que se indujera al paciente a un estado de coma. Mediante este proceso, los médicos fueron capaces de curar la enfermedad en ese caso particular. Intentos posteriores de coma inducido como método de tratamiento, han fallado.


Exámenes:

En caso de ser mordido por un animal, se debe tratar de reunir toda la información posible sobre dicho animal y llamar a las autoridades locales del servicio de control de animales para capturarlo de manera segura. Si hay sospecha de rabia, se vigilará al animal para detectar signos de esta enfermedad.
Se usa una prueba especial, llamada inmunofluorescencia, para examinar los tejidos cerebrales después de la muerte del animal. Esta prueba puede revelar si el animal tenía rabia o no.
La misma prueba se puede emplear para detectar la rabia en humanos, usando un fragmento de piel del cuello. Los médicos también pueden buscar el virus de la rabia en la saliva o en el líquido cefalorraquídeo

Complicaciones:

Sin tratamiento, la rabia puede llevar al coma y a la muerte. En casos poco frecuentes, algunas personas pueden tener una reacción alérgica a la vacuna antirrábica.

Expectativas (pronóstico)

Es posible prevenir la rabia si la vacuna se administra dentro de los primeros 2 días después de la mordedura. Hasta la fecha, nadie en los Estados Unidos ha padecido de rabia si se le ha administrado la vacuna pronta y adecuadamente.
Una vez que aparecen los síntomas, son pocas las personas que sobreviven a la enfermedad. La muerte por insuficiencia respiratoria generalmente ocurre dentro de los 7 días después del comienzo de los síntomas.

Perros y Rabia:

Los perros son uno de los animales que transmite el virus de la rabia a los humanos. Comúnmente en zonas urbanas con altas densidades de población canina.
La rabia urbana se presenta mayormente en zonas de alta densidad poblacional canina; por ello, la medida de prevención mas eficaz para cortar este ciclo de transmisión de la rabia en población canina son las campañas masivas de vacunación antirrábica canina, de manera de cortar la cadena de transmisión de virus de la rabia, a través de la disminución de canes susceptibles a la rabia.
Los murciélagos son los principales transmisores de la rabia silvestre en zonas de selva, siendo más difícil su control.

Prevención:

• Evitar el contacto con animales desconocidos.
• Hacerse vacunar si la persona trabaja en ocupaciones de alto riesgo o viaja a países con una alta incidencia de esta enfermedad.
• Vacunar los perros y gatos hacia los 4 meses de edad, seguido de una vacuna de refuerzo un año más tarde y después otra cada 1 a 3 años, según el tipo de vacuna que se utilizó.
• Acatar las regulaciones de cuarentena al importar perros y otros mamíferos en países libres de rabia.

En caso de heridas se debe limpiar bien con agua y jabón y buscar atención médica profesional. Es necesario que un médico realice una limpieza minuciosa de la herida y saque cualquier objeto extraño (desbridamiento). La mayoría de las veces, no se deben usar suturas para las heridas por mordeduras de animales.


La mejor protección consiste en que la gente vacune sus animales domésticos contra la rabia, a la vez que cualquier perro o gato callejero que viva cerca de sus hogares, y que las autoridades municipales conduzcan campañas de vacunación masivas entre los perros y gatos vagabundos, y al mismo tiempo esterilizándolos. La matanza de animales nunca ha resultado ser un método efectivo para controlar la propagación de la enfermedad. 


En las regiones donde ocurre la rabia transmitida por el murciélago, se debe evitar que los murciélagos hagan nido en áreas donde duerma la gente o animales domésticos. Las transmisiones de rabia por murciélago ocurren típicamente a través de contacto accidental nocturno, y como los murciélagos generalmente no dejan huellas de colmillo más grandes que las picaduras de mosquito zancudo, las víctimas con frecuencia no se dan cuenta que han sido mordidas.
No hay cura alguna una vez que aparecen los síntomas de la rabia. Es entonces inevitablemente fatal. Sin embargo, el período relativamente largo de incubación permite que la terapia de post-exposición sea eficaz si se hace correctamente.

Esta enfermedad, si no se trata con la máxima urgencia, acaba provocando la muerte del enfermo. Cuando una persona se contagia, los síntomas de la enfermedad pueden tardar entre 60 y 300 días en manifestarse. En algunas regiones aún es un gran problema de salud pública como en algunos países de Asia y África, en la que causa de más de 55.000 muertes al año, de las cuales la mayoría de las víctimas son menores de 15 años de edad.


Fuente: Blog Ciencias Médicas / Dr. Avilio Méndez Flores

Desparasitación del cachorro



El siguiente calendario es un modelo orientativo que puede estar sujeto a los cambios y variaciones que el veterinario considere adecuados para cada perro: 

  • Cachorros entre 21 y 30 días. En esta fase vital del cachorro, lo habitual es desparasitarlo con un jarabe, gotas o pasta. El motivo es que todavía es lactante y no digiere con facilidad el producto en formato de comprimidos. A esta edad son recomendables los productos antiparasitarios que exterminan tanto los parásitos adultos como los huevos.

  • Al mes y medio de edad. La desparasitación es recomendable antes de la primera vacunación.
    Las vacunas no deben aplicarse en un perro que no esté desparasitado. La razón es que un perro lleno de parásitos no tiene el organismo preparado para que la vacuna sea efectiva


      

    El protocolo pasa por realizar primero la desparasitación del cachorro, hacer después un análisis de heces y por último vacunar, una vez que está libre de parásitos.
    Las siguientes desparasitaciones se llevarían a cabo a los dos meses de edad del cachorro y otra a los tres meses.

  • Entre tres y seis meses de edad será necesaria otra aplicación si el perro tiene más probabilidades de contraer parásitos (vive en el exterior o en el campo). En este caso, la desparasitación se llevará  a cabo con una periodicidad mensual, de manera que coincida con la vacunación antirrábica. Esta inyección se aplica alrededor de los seis meses.

  • A partir de los seis meses, la frecuencia de desparasitación del cachorro de perro puede ser mensual o trimestral, como se ha explicado, en función de la zona donde reside el animal (rural, urbana o en una zona residencial).

    Hay precauciones que conviene tener en cuenta y con el veterinario. Cuando los perros coinciden en un mismo parque y hay más riesgo de contagio, como suele ocurrir en las ciudades, los médicos caninos recomiendan la desparasitación mensual.
    En otras ocasiones con menos peligro de contagio de parásitos entre perros, lo habitual es que la periodicidad de la desparasitación sea trimestral.

 

Excepciones en cachorros y perros adultos

  • Cuando un perro va a ir a una residencia. En este caso, es aconsejable la desparasitación interna y externa antes de que el perro ingrese en el centro. Y repetirla cuando salga.

  • Bebé nuevo en la familia. Con esta feliz circunstancia, el procedimiento pasa por desparasitarlo cuando el bebé llega a casa. Después, hay que continuar el calendario habitual. Con niños en casa, hay veterinarios que recomiendan la desparasitación mensual del perro.

  • Hembras que van a parir. Es conveniente desparasitarlas al principio del celo y alrededor de quince días antes del parto (a los 45 días de gestación). Una perra gestante puede transmitir a los fetos los parásitos a través de la placenta.


La desparasitación externa del cachorro

La desparasitación externa del cachorro es de carácter principalmente preventivo. Se utilizan productos como pipetas, collares para combatir pulgas y garrapatas.
Es recomendable comenzar con métodos de desparasitación externa a partir de los dos meses de edad del cachorro. Para entonces, el animal ya tiene formado su sistema inmunitario y el producto cumple su cometido con eficacia.


Fuente: Eroski Consumer / Carolina Pinedo

07 enero 2013

Golpe de calor

El golpe de calor en los perros: prevención y cuidados (*)

El calor afecta a los perros con mucha más rapidez que a los humanos. Su mecanismo para enfrentar  los cambios bruscos de temperatura es diferente al nuestro y no es tan eficaz.
Es muy importante ser consciente de ello, lo que a nosotros nos parece 'un momentito' puede ser fatal para un can: cuando hace calor, dejar a un perro en un coche con las ventanas cerradas puede causarle la muerte en poco más de 10 minutos. 

Los perros eliminan el calor de varias formas: jadeando (a través de la respiración), sudando (a diferencia de los humanos, que sudamos por todo el cuerpo, ellos sólo lo hacen a través de las almohadillas de las patas) y a través de zonas de poco pelo como el vientre (cuando se tumban en superficies frescas es precisamente para liberar calor por conducción)

Los golpes de calor -hipertermia- afectan más a los perros más mayores, a los más jóvenes y a los que ya de por sí tienen más problemas de respiración, que son los de hocico chato (braquicéfalos): Bulldog inglés, Bulldog Francés, Carlino, Boxer, Pequinés, etc.
Los perros de pelo oscuro tienen más riesgo de sufrir hipertermia que los de pelo claro, el negro absorbe más el calor.
Si, además, vuestro perro tiene alguna cardiopatía es primordial cuidarlo y evitar riesgos porque el resultado será aún más grave o fatal.


¿Cuáles son los síntomas de un golpe de calor?
Los primeros síntomas no graves son mareo, mucho jadeo, debilidad y apatía. A partir de ahí, los síntomas graves son shock y desmayo.

Consejos básicos para evitar la hipertermia
Nunca deje a su perro solo dentro de un coche o de cualquier espacio reducido, ni con las ventanas abiertas. El estrés que le puede producir el estar solo es un factor de riesgo añadido.
Asegúrese de que siempre disponga de agua fresca y limpia, que pueda estar en la sombra y que tenga algún sitio fresco en el que echarse.
No lo saque a la calle y desde luego no lo haga correr o hacer ejercicio durante las horas de más calor. Además, andar por el asfalto cuando está muy caliente le puede causar quemaduras en las almohadillas.
Dele de comer cuando hayan pasado las horas de más calor.
Si es de pelo claro, tenga en cuenta que su trufa y ciertas zonas de su cuerpo (orejas, donde no tenga pelo, etc.) se pueden quemar con el sol igual que nos pasa a nosotros. 

¿Qué hacer ante un golpe de calor?
Si no puede ir a urgencias de inmediato, estos consejos pueden ser muy útiles en un primer momento. Pero, sin duda, si cree que su perro ha tenido un golpe de calor debe acudir al veterinario cuanto antes.

- Lo más importante es enfriar al perro para que su temperatura baje hasta 39ºC
- Si estaba en un coche o en algún lugar cerrado donde la temperatura es elevada, trasládelo en brazos lo antes posible a una zona donde haga menos calor, a la sombra.
- Mójele con agua fresca, nunca con agua helada. Puede refrescarlo pasando toallas húmedas por los pies, por el cuerpo, por el cuello, en torno a la cabeza, pero no lo cubra por completo con ellas.
- Abaníquelo.
- Humedézcale la boca pero no lo fuerce a beber.
- Frote alcohol o pase un cubito de hielo por sus axilas, ingles y nuca.
- Masajee la parte inferior de las extremidades para favorecer la circulación.
Si ya respira bien, se recupera y parece estar mejor no lo dude: al veterinario.

Fuente. srperro.com


(*) Nota anterior sobre el mismo tema:  29/11/2011